La tremenda Su Heng dijo una vez que la vida es demasiado corta para uno pagar sus propios errores. Tiene sentido. Es mejor disfrutar la vida al máximo, aprender de los errores de los demás para no cometerlos y no tener que pagar por los platos rotos. Eso si es sabiduría. Pero a veces quiero cometer algunos errores para retar a la suerte. No todo tiene que suceder como se nos ha predicho. Hace poco comentábamos unos amigos y yo que hemos llegado al punto de la historia en que todo lo que se nos ha enseñado hay que ponerlo en duda. No siempre que está nublado llueve. Pero me han dicho que soy un hombre de pocos riesgos, y aunque estoy dispuesto a cambiar eso, no pienso meter la pata. Para mayor seguridad, seguiré el consejo de aprender de los demás. Esos errores son menos dolorosos.
PS: Errar es de humanos y aprender de los errores también.
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